Sabemos que hay parejas que solo quieren celebrar un aniversario y otras más que quieren realizar una boda que no tenga ni carácter religioso ni legal.
Para ustedes, tenemos las Bodas Mayas o Espirituales. Celebraciones llenas de simbolismos que se conectan con el universo, los elementos de la tierra y con los dioses para crear una unión espiritual.
La ceremonia se puede adaptar a una gran variedad de lugares, por lo que tendrán muchas opciones de acuerdo con su ubicación y estilo. Sin embargo, lo más común es que lleve a cabo en cenotes o en la selva de Yucatán o Quintana Roo, cunas de la cultura maya.
Tradicionalmente la novia lleva un huipil blanco, que es la ropa tradicional femenina maya, y el novio un traje blanco tejido a mano.
La música que acompaña el evento debe ser interpretada por instrumentos de viento y percusión, que datan de la época prehispánica.
Antes de comenzar la ceremonia, la pareja necesita el permiso de estas energías ya que para los mayas, están vivos y escuchan todo lo que dicen los seres humanos.
El chamán es alguien que dirige la ceremonia, ya que puede ver y hablar con estos elementos a través de oraciones en el idioma maya para pedir a todos los elementos que estén presentes.
El copal y el incienso se usan para limpiar las malas energías y pensamientos del aura de la novia, el novio y los invitados a la boda.
Después de que todas las auras de los presentes están limpias, es hora de pasar al altar.
Lo que se debe ofrecer en el altar son los elementos naturales más importantes para los Mayas, como granos de maíz, granos de cacao, flores regionales, frutas y pétalos, que representan el lenguaje secreto del amor.
Finalmente, la unión de la pareja se sella con el intercambio de anillos que representan la promesa de matrimonio.
Todo este ritual puede ser modificado conforme a los gustos y necesidades de cada pareja, pero generalmente esto que te contamos, es lo más común.